Un verano sin desperdicio
En verano el desperdicio en los hogares es mayor, debido al aumento de las temperaturas y a las vacaciones que nos tomamos.
Por ello, como cada verano, hemos reunido una serie de sencillos consejos para que los podamos llevar a cabo en el día a día y lograr un planeta más sostenible.
Puedes empezar cuantificando durante unos días el desperdicio de alimentos de tu casa. Y luego puedes incorporar estos consejos:
- Organiza un menú semanal para saber qué alimentos debes comprar.
- Luego haz una lista tomando de referencia el menú antes de ir a comprar.
- En la compra intenta seguir la lista, y si hay alguna oferta que te parezca interesante piensa si de verdad la necesitas. Quizá puedas permitirte el lujo de comprar 1 o 2 productos que no estén en la lista.
- Organiza los alimentos. Coloca los alimentos que acabas de comprar detrás de los que ya estaban. Haz uso del famoso FIFO (First In, First Out).
- Conserva los alimentos que necesiten frío en la nevera, como frutas, hortalizas y verduras. En verano mejor dentro del frigo.
- Comprueba con frecuencia el etiquetado, la fecha de caducidad y la de consumo preferente.
- Si hay algún alimento que corre el peligro de acabar en la basura congélalo o cocínalo. No queremos que acabe en la basura. Si te vas de vacaciones revisa antes de irte qué tienes en la cocina. ¡Evitemos encontrar cadáveres alimentarios a la vuelta!
- Cocina ajustando las cantidades. Entierra el dicho «mejor que sobre a que falte».
- Conserva las sobras correctamente. Y dales salida con nuestras recetas de aprovechamiento.
- Con los residuos orgánicos puedes hacer compost. Muchas localidades ya tienen un contenedor para estos residuos. Comprueba si dónde vives hay estos contenedores.
¿Te sumas a la lucha contra el desperdicio este verano?
Foto: Pixelme Stock Photography/Pexels