Retos y oportunidades para prevenir el desperdicio alimentario
La Fundación ENT (Innovación Ambiental al Servicio de la Sociedad) ha publicado el informe “Posibilidades normativas y fiscales para prevenir el desperdicio alimentario en Cataluña” cuyo objetivo es identificar los principales retos y oportunidades existentes en esa comunidad autónoma para prevenir el desperdicio de alimentos, partiendo del marco normativo existente y de las actuales competencias autonómicas.
Según se afirma en el informe, uno de los retos importantes es identificar qué se entiende por desperdicio alimentario y se define como “cualquier parte comestible de un producto o parte de él, cultivado, recogido o procesado para el consumo humano que hubiera podido ser ingerido, o ingerido con una mayor calidad, y que finalmente es gestionado como residuo o destinado a uso no alimentario”.
En el citado informe se destaca que las medidas adoptadas para una fase de la cadena alimentaria pueden afectar a la totalidad de la misma, por lo que se debe tomar en consideración el lugar en el que se produce el desperdicio y sus causas. Asimismo, se señala que las medidas propuestas tienen como principal objetivo la reducción del desperdicio de alimentos, englobando tanto la prevención como la reutilización:
• Medidas para favorecer buenas prácticas a lo largo de la cadena alimentaria.
• Medidas para alargar la vida útil de los alimentos.
• Medidas para facilitar la canalización de excedentes alimentarios a lo largo de toda la cadena alimentaria.
• Medidas para facilitar las labores de espiga.
De entre las normas en el ámbito fiscal, cabe destacar:
• La propuesta de deducciones autonómicas en el IRPF para favorecer las labores de espiga.
• La aprobación de una norma análoga a las leyes del buen samaritano.
• Establecer incentivos fiscales municipales para reducir el desperdicio alimentario.
Puedes acceder al informe Completo.