La relación entre el desperdicio de alimentos y el derecho a la alimentación
El derecho a la alimentación adecuada significa que las personas tengan disponibilidad y accesibilidad a los alimentos, para ello los Estados deberían garantizar que los sistemas de producción, procesamiento y comercialización dispusieran de alimentos.
Si bien se viene discutiendo desde hace tiempo la naturaleza, contenido y obligaciones derivadas del derecho a la alimentación, este derecho sigue sin ser reconocido en muchos países. Teniendo en cuenta la discrecionalidad de los Estados a la hora de establecer las medidas necesarias para la implementación del derecho a la alimentación, el Pacto Internacional de Derechos Económicos, Sociales y Culturales establece que los Estados deben tomar medidas inmediatas para que nadie pase hambre en su jurisdicción, al tiempo que establecen las medidas adecuadas para implementar progresivamente el derecho a la alimentación adecuada.
Por su parte, el Comité de Derechos Económicos, Sociales y Culturales recomienda a los Estados que den los pasos necesarios para asegurar la realización progresiva del derecho a la alimentación; para ello, cada Estado debería elaborar su propia estrategia nacional, así como una ley marco relativa al derecho a la alimentación. Tal estrategia debería asegurar la gestión sostenible de los recursos empleados en la producción de alimentos. Simultáneamente, se deberían identificar medidas políticas concretas adaptadas al contexto específico de cada Estado centradas en las causas que impiden la realización del derecho a la alimentación adecuada, siendo el desperdicio de alimentos una de ellas.
Las iniciativas regionales, nacionales y locales para reducir el desperdicio de alimentos son solo ejemplos que pueden contribuir a la realización del derecho a la alimentación, sin olvidar que tales iniciativas deben contemplar todos los eslabones de la cadena alimentaria y los sectores relacionados con la alimentación, tanto públicos como privados. Por otra parte, no se debe olvidar la importancia de mejorar la sostenibilidad de los sistemas alimentarios para asegurar el acceso de todas las personas a la alimentación adecuada.
En definitiva, si bien la FAO señala que existe una estrecha relación entre el desperdicio de alimentos y el cumplimiento del derecho a la alimentación, no es menos cierto que para el reconocimiento efectivo de ese derecho se deben analizar otras causas conjunta y coordinadamente.