- Se trata de amasar la miga de pan con los huevos batidos hasta que esté bien empapada y absorbida. Cuanto mejor sea la miga, mejor será el postre; dependerá de si el pan absorbe más o menos leche.
- Pondremos el aceite a calentar y mientras, usando una cuchara sopera, cogeremos porciones de esa masa y le daremos forma de buñuelo (podemos ayudarnos de otra cuchara para ello) y las reservaremos en un plato hasta que el aceite tenga la temperatura para freír esos buñuelos.
- Los iremos friendo sin poner muchos en la sartén para que no baje la temperatura del aceite, dándolos la vuelta para que se fría enteros y sacándolos sobre papel absorbente para queden con le menor aceite posible.
- Mientras hacemos estos pasos pondremos a calentar la leche con el azúcar, la canela y la piel de cítrico. Cuando se haya disuelto el azúcar y perfumado con la canela y el cítrico añadiremos los buñuelos fritos y dejaremos que cojan sabor y se empapen de esa leche. Apagaremos el fuego y los comeremos no muy calientes para poder disfrutarlos y saborear todo.
- Podemos acompañarlos de miel (rebajando la cantidad del azúcar). Si la miga de pan absorbe mucha leche, podremos añadir más. Todo depende de si los queréis líquidos, o si os gustan más espesos.
¡Qué aproveche!
Ingredientes
- Miga de pan 250grs
- 3 huevos
- Leche entera 1/2l. o 3/4l.
- Aceite de oliva suave (para freír)
- 75 gr. de azúcar
- Canela en rama (1/2)
- Piel de limón/naranja