Muchos se preguntan si el tomate es una fruta o una verdura. Lo que está claro es que el tomate es una hortaliza pero, aunque muchos creen que se trata de una verdura, en realidad se trata de una fruta.
El tomate contiene pocas calorías. En comparación con otras frutas y hortalizas tiene poca fibra (1,8 %) pero las semillas, la pulpa y la piel son suficientes para favorecer el tránsito intestinal.
Destaca por su contenido en el trío de vitaminas antioxidantes C, E y A, esta última en forma del precursor betacaroteno. También tiene vitaminas del grupo B, más alto que el de otras hortalizas, en especial de vitaminas B1, B6 y sobre todo de ácido fólico.
El tomate se puede comer de muchas maneras, crudo o cocinado. Dos recetas estrellas del tomate son el salmorejo y el gazpacho.
Los tomates pierden su aroma rápidamente cuando se refrigeran, por lo que es mejor almacenarlos a temperatura ambiente y protegidos de la luz. Si se han comprado o cogido verdes y se quiere acelerar su maduración, se pueden introducir en una bolsa de papel con una manzana madura.