La calabaza es digestiva, deliciosa, de aspecto atractivo y está repleta de sustancias con multitud de beneficios sobre la salud. Se pueden preparar de muchas maneras.
En España, la mitad de las calabazas que se consumen proceden de las islas Canarias y Andalucía. También se cultivan en Valencia, Murcia y Cataluña, pero los grandes productores mundiales son China, India, Ucrania, Estados Unidos, Egipto y México.
Esta hortaliza presenta una gran riqueza vitamínica, especialmente de betacaroteno o provitamina A y de las otras dos vitaminas antioxidantes, la C y la E. Y varias vitaminas del grupo B, (B2 y B6 y ácido fólico).
Aparte de poco calórica, es uno de los alimentos más medicinales de nuestra huerta.
Cómo conservar y consumir
Para conservarlas lo ideal es un lugar fresco y seco. Una vez partidas, en la nevera duran al menos una semana, cubiertas con film, tapando la piel, o guardadas en una bolsa perforada
Se puede usar para hacer múltiples recetas: en crema, sopas, caldos, purés, al horno, hervida, salteada, rehogada, gratinada, para dar color a un estofado o como guarnición de carne, en pastael o en flan, sobre la pizza, como relleno de raviolis o canelones, o como guarnición de un arroz pilaf, una legumbre o una pasta.